Ir al contenido principal

MEDIO LLENO MEDIO VACÍO





Me gusta emplear la tanguera frase “20 años no son nada” y la repito una y otra vez queriendo expresar de alguna forma lo que para mí ha resultado la emoción, el acontecimiento de mi encuentro con el tango, no hace tanto como veinte pero sí muchos ya. Y es que el Tango ha supuesto que mi vida haya cobrado sentido durante estos cortísimos años de felicidad y entrega a este abrazo largo y cálido.

Y de repente, nada. El abrazo disuelto, los pies quietos, el alma perdida. Todos esperando y anhelando. A la hora de escribir estas reflexiones nueve meses, casi diez ya nos han pasado más lentos que los veinte años de Gardel. La espera desespera y después se amolda, se acomoda.

Nunca pensé que la frase del célebre y nostálgico tango de Gardel fuese tan premonitoria. Casi toda la canción se adapta extrañamente a nuestro desasosiego, empezando por el constantemente invocado título, por el “Volver” que los labios tangueros no dejan estos meses de repetir, a veces convencidos, a veces ilusionados y esperanzados, a veces nostálgicos y desesperanzados.

El proyecto “9 meses sin milonga” de Linaje de Percal  ha recogido testimonios de tangueros y tangueras en el paro forzoso en que la Covid nos ha sumido a todos. Antonio, Sonia, Isabel, Rafa, Inma, Francisca, Manuela, Antonio, Gastón, Laura y otros nos abren sus corazones y desvelan sus temores y esperanzas y coinciden como los engranajes. El vacío que nos dejó, la conciencia de lo perdido, la incertidumbre del regreso, la aceptación, la determinación.

Su minuto de añoranza, de dolido recuerdo, nos instala en la misma dimensión. Su esperar, su determinación de volver no sin dudas nos refleja como si estuviéramos ante los espejos de las salas de baile que no hace tanto tuvimos que dejar para ya no retomar el siguiente trago de Di Sarli o D’Arienzo, que se empeñaron en escanciarlo  desde entonces en las redes virtuales, como si fuera algo pasajero, provisional. Solo cuando los meses se deslizaron implacables, solo cuando amenazaron con anualizarse empezamos a ser conscientes del vacío.

Estas confesiones ante la cámara son como las confesiones desde el sofá del psicoanalista. A base de sincerarnos, de enumerar los temores, de hablar de lo que puede ser o no ser hace que podamos llegar a lo más profundo de nuestros sentimientos y desde ahí poder diseñar nuestra propia terapia de recuperación.

El vacío que nos dejó, “La noche que te fuiste me quedé igual que una sombra…” “Echo de menos los abrazos, las risas…” “Una película de ciencia ficción, terror, drama. Es como ir en un tren del que no conocemos el destino…”

Son las mismas que alumbraron/ Con sus pálidos reflejos/ Hondas horas de dolor…

La conciencia de lo perdido, “Ahora que no lo tenemos nos damos cuenta de lo innecesario que eran los detalles. El piso, la música, el frío o el calor, milongueros muy mayores o demasiado jóvenes…Lo importante era danzar abrazados”

Incertidumbre en el volver, “El tango lo hará, pero lo haremos nosotros?, ¿Cómo? ¿Cuándo? ¿De qué forma?

Tengo miedo del encuentro/ Con el pasado que vuelve/ A enfrentarse con mi vida

Tengo miedo de las noches/ Que pobladas de recuerdos/ Encadenen mi soñar…

Aceptación y determinación, “Sólo nos ha privado del baile, pero no del Tango. A los profesionales les decimos, siempre hemos estado y seguiremos estando tan pronto sea posible”

Sentir/ Que es un soplo la vida/ Que veinte años, no es nada/ Que febril la mirada/ Errante en las sombras/ Te busca y te nombra

Quizá quiera quedarme con esto: Aunque la duda me asalte, me haga vacilar en mis propias capacidades, aunque culmine una bella etapa, aun si no regresara, me quedaría el consuelo de saber que el Tango volverá. Que el tango siempre vuelve, que sabe esperar.

Azahara Palomeque en su artículo de análisis sobre las consecuencias pandémicas “El año que perdimos el cuerpo” en la revista La Marea concluye con un párrafo que podríamos suscribir cualquiera de nosotros 

 “La pandemia nos ha robado el cuerpo precisamente cuando hemos sido más conscientes de su mortalidad. La necesidad de salvarlo del virus ha provocado, paradójicamente, que se aleje de aquello por lo que merece la pena tenerlo…” y concluye su artículo con este deseo: “Si 2020 ha sido el año en que perdimos el cuerpo, de tan innúmeras y dolorosas formas, queda esperar que 2021 sea el año en que lo recuperemos: sanos, vivos, pero, sobre todo, juntos.”

Va llenándose el vaso poco a poco y yo me siento minúsculo flotando en él, alargando los brazos, esperando sentir el fin en las yemas de mis dedos, poder atrapar el borde. Poder llegar…

Volver/ Con la frente marchita/ Las nieves del tiempo/ Platearon mi sien…

http://tangoenvalencia.es

Comentarios

Entradas populares de este blog

TANDAS CON TERESA

  Teresa fue mi profesora de Tango preferida.  Tanto que no me atreví a sustituirla por ninguna otra. Durante dos años nos intentó transmitir pacientemente la milonga lisa y a traspié. No se cómo no perdió ella la paciencia con nuestra torpeza. Su técnica se apoyaba en el profundo conocimiento de la música que practicaba y de la que vivía. Y luego, claro, su amor por el tango. Cuando te enseñaba algo lo veías desde el mismo momento en que te verbalizaba lo que tenías que hacer. Era capaz de hacerte comprender sin apenas esfuerzo y sobre todo te transmitía la emoción del baile en cada clase. Y luego, ya digo,   su paciencia sin límite. Pero desde la primera vez que la vi aun sin conocerla todavía, destacó en mí su aspecto dulce, frágil, sensible. Fragilidad que luego se reveló como una fortaleza increíble. Luchó contra la adversidad con tesón, sin dar tregua al desánimo como solo una mujer es capaz de conseguir. En la familia tanguera conozco dos casos, y ambos era...

ENCUENTRO, MARATÓN O FESTIVAL

  En el Tango salón, es esencial el cambio de pareja tras cada tanda. Ésta junto a otras es la causa de musicalizar con tandas de tres o cuatro temas o piezas. El cambio de pareja es en el Tango una característica más acusada que en cualquier otro estilo de baile en pareja. LOS ENCUENTROS Es muy posible que esto último fuese la causa primera de la aparición de encuentros entre aficionados del Tango . Quizá la milonga local se quedara muy limitada en un momento determinado y el cuerpo tanguero te pidiera conocer otros bailarines que pudiesen compartir abrazos contigo, así que las asociaciones que empezaron a  surgir en España en los años 90, que en un principio centraron sus esfuerzos en conseguir organizar milonguitas locales para disfrute y práctica de los socios y de los visitantes, comenzaron a organizar encuentros de aficionados en distintos lugares de España gestionando una mínima logística, alojamiento, comida, visita turística al lugar donde se convocaba y aprov...

¿ME LLEVAS O TE LLEVO?

  ¿Me llevas o te llevo? Esta pregunta puede ser habitual en muchas de nuestras milongas y encuentros hoy. El tango evoluciona lentamente, como la sociedad machista que lo sustenta, pero evoluciona. Ya lo expresé en el artículo en este mismo blog “Los roles” publicado el 3 de enero de 2022   en el que comentaba el debate que habían tenido en facebook   las bailarinas argentinas María Asunción Prado y Miranda Basso, Aurora Lubiz, y Natalia Fossati reflexionando sobre el camino de la mujer en el tango. Allí decía: “Desde distintos puntos de partida se describió la realidad histórica del baile del tango y los pasos que, según la experiencia de cada ponente, se habían dado, se estaban dando y habrían de darse para avanzar hacia la igualdad de roles, cuando no hacia la abolición de roles y en todo caso hacia la libre elección de rol de cada uno de los practicantes de tango. Todo ello desde la premisa de la discriminación manifiesta de la mujer tanguera.” Por supuesto ...