En el Tango salón, es esencial el cambio de pareja tras cada
tanda. Ésta junto a otras es la causa de musicalizar con tandas de tres o
cuatro temas o piezas. El cambio de pareja es en el Tango una característica
más acusada que en cualquier otro estilo de baile en pareja.
LOS ENCUENTROS
Es muy posible que esto último fuese la causa primera de la
aparición de encuentros entre aficionados del Tango. Quizá la milonga
local se quedara muy limitada en un momento determinado y el cuerpo tanguero te
pidiera conocer otros bailarines que pudiesen compartir abrazos contigo, así
que las asociaciones que empezaron a
surgir en España en los años 90, que en un principio centraron sus
esfuerzos en conseguir organizar milonguitas locales para disfrute y práctica
de los socios y de los visitantes, comenzaron a organizar encuentros de
aficionados en distintos lugares de España gestionando una mínima
logística, alojamiento, comida, visita turística al lugar donde se convocaba y
aprovechando fines de semana, mejor si coincidían con algún puente festivo.
Por su parte, las milongas de Buenos Aires tenían la costumbre de incluir
como reclamo la exhibición de bailarines profesionales surgidos de las
múltiples academias regidas por reconocidas figuras del Tango y en algún caso
de los certámenes de Tango que cada año se convocan allá. Estas parejas a su
vez serían más conocidas entre los bailarines de la capital porteña y de todos
los lugares del mundo que visitan la capital del Tango. Y Europa, y España
concretamente, no fueron ajenos a esta costumbre y empezaron a contratar
bailarines profesionales en los encuentros. Estos maestros impartían clases
magistrales y realizaban exhibiciones en las milongas de gala. El ser humano
aprende a base de imitar y en el Tango esto suponía poder observar e imitar
hasta cierto punto a estas grandes figuras. En muchas ocasiones se complementaban
con orquestas y cantantes. Por supuesto, el formato se mantiene hoy aunque cada
vez más oímos convocatorias de los otros dos a continuación: festivales y
sobre todo maratones.
LOS FESTIVALES
Grandes encuentros añaden una serie de actividades muy
variadas: espectáculos de tango, exposiciones, exhibición de películas, conciertos, representaciones…En
muchos casos, la ciudad que los acoge colabora activamente patrocinando de
alguna forma, cediendo locales, publicitando, facilitando alojamientos e
incluso organizando actos. Surgen así los festivales.
Naturalmente, esto también supone mayor coste para los
organizadores que al caché de cada pareja de bailarines u orquestas, cantantes,
músicos, etc, tienen que añadir el coste de los traslados, alojamiento y comida.
Quizá sea por eso o quizá sea por anteponer el baile a cualquier otra consideración, algunos encuentros no incluyen estas clases y
exhibiciones, limitándose a la programación de milongas donde abrazarse y
conocerse gentes de todo el mundo y bailar el número máximo de horas posible es
el único objetivo.
LOS MARATONES
Por tanto, como extensión a estos últimos encuentros, se
añadieron horas de baile, tipo a la célebre película “Danzad, danzad
malditos” y surgieron los maratones donde la máxima es bailar sin parar
largos periodos de tiempo con algún que otro “tentempié” y lugar para reposar
incluido.
No obstante, admito que lo anterior puede ser una clasificación
muy simple y que a veces no funciona completamente. El portal especializado
Tangopolix.com dice en su clasificación de eventos: “…algunos Festivales
Internacionales de Tango son tan grandes hoy en día que incluso pueden incluir
un Maratón de Tango en su programación, o son tan diferentes y originales que
pueden no encajar en ninguna de las categorías propuestas…”
Pero, sea como fuere, lo cierto es que la publicidad en
redes y webs anuncian encuentros, maratones y festivales y a ello me remito.
He intentado indagar en las diferencias que pudieran tener
los encuentros y maratones, puesto que los festivales son más
específicos y difíciles de comparar. Algunos
de sus parámetros comparativos pueden ser estos, siempre con la salvedad que
sólo he recurrido a una limitada cantidad de eventos (8 maratones y 8
encuentros en Europa) y que la variedad y peculiaridad de eventos desborda
seguramente todas las reglas:
Maratones:
Media de duración: 4 días; Media de
horas de baile: 25,5; Media de Djs: 4; Media de precios: 108,75€; Anuncian
alguna clase de refrigerio en su web (Comidas, snaks, café y bebidas…: 37,5% de
los examinados
Encuentros:
Media de duración: 4 días; Media de
horas de baile: 26; Media de Djs: 3; Media de parejas de bailarines y otros: 3;
Precios: 71€
En el caso de los encuentros,
alguno de ellos ofrece cenas o comidas con suplemento en el precio. Nos hemos
limitado a los precios en los paquetes de milongas.
No existen por tanto diferencias
significativas entre unos y otros, casi podríamos decir que la diferencia
pudiese estar más que nada en la denominación misma, excepto en la presencia de
maestros bailarines, orquestas en vivo u otras que los maratones no incluían en
ningún caso. Las clases magistrales en los encuentros pueden por tanto
encarecer el precio final en función de las que se contraten en los diferentes
paquetes que suelen ofrecerse. En todo caso son opcionales, como las comidas y
cenas.
No quisiera dejar pasar que una
gran cantidad de eventos en ambos formatos incluyen la etiqueta de “balance en
los roles” lo que significa que el equilibrio entre líderes y seguidores cada
vez se asegura de forma más decidida. Baste decir que el aludido Tangopolix.com
arrojaba el dato de 664 registros con la etiqueta “Role Balanced” listados en
el momento de la consulta. Junto a ésta, la exigencia de códigos estrictos, 284
eventos con la etiqueta: “Strict Tango Codes”
Por último, constatar la tendencia
creciente a la oferta maratón, en comparación con el formato encuentro.
Como ejemplo, en una consulta a la base de datos de Tangopolix, la búsqueda
maratones listada arrojó la cifra de 23, mientras que la de encuentros fue de
tan sólo 7, incluidos tango de fines de semana (“Tango Weekend / Festivalito”),
si bien es verdad que en las búsquedas con la etiqueta “Festival” y que listaba
23 eventos, nos encontramos con varios que podían encuadrarse también en la
categoría de “encuentro”.
Otro dato que me sorprendió es que
las horas y Tds de uno y otro formato no presentaban tampoco diferencias
notorias o incluso presentaban un pequeño aumento en la media de horas de baile
en los encuentros.
De todas formas, ya digo, esta
prospección no tiene ninguna validez demostrativa pues es completamente
aleatoria, con una mínima muestra (16 eventos en total) y donde no tuve en
cuenta peculiaridades de unos y otros. En cuanto a precios, hay un dato a favor
de los encuentros, aunque quizá en alguno de los maratones se incluyese
alojamiento siquiera comunitario o colectivo.
Concluyo que la asistencia a unos u
otros quizá tenga más que ver con el lugar a visitar o la gente con la que
compartir que con cualquier otra consideración. Por cierto, en Valencia tenemos
muestras de todas las modalidades.
De todas formas, puedes dejarnos si
lo deseas constancia anónima de tu preferencia…como simple curiosidad.